¿Por qué surgió el RGPD?

El auge de las redes sociales, las plataformas digitales y el comercio electrónico ha impulsado un crecimiento sin precedentes en la recopilación de datos personales. En la última década, empresas de diversos sectores han utilizado esta información con fines comerciales, muchas veces sin el conocimiento o consentimiento explícito de los usuarios.

Esta realidad evidenció la necesidad de normativas estrictas en materia de privacidad, con el fin de regular el tratamiento de los datos y prevenir posibles abusos. El RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) nació como una medida clave para garantizar la seguridad y el control de la información personal en la Unión Europea.

Ciberataques y brechas de seguridad: Un detonante clave para el RGPD

Uno de los principales factores que aceleró la creación del RGPD fue el incremento de las amenazas cibernéticas y las filtraciones de datos. La creciente cantidad de incidentes de seguridad, como el hackeo masivo de Yahoo, que expuso miles de millones de cuentas, o el caso de Cambridge Analytica, donde se accedió ilegalmente a datos de millones de usuarios de Facebook, puso en evidencia la fragilidad de la información personal en el entorno digital.

Estos escándalos afectaron la confianza del público en las empresas y demostraron que la falta de una regulación unificada ponía en riesgo tanto a los ciudadanos como a las organizaciones.

El RGPD y los derechos de los ciudadanos sobre sus datos personales

Antes de la implementación del Reglamento General de Protección de Datos, los ciudadanos europeos tenían poco control sobre su información personal. Las empresas podían recolectar, almacenar y procesar datos sin una base legal clara ni el consentimiento de los usuarios.

Con la llegada del RGPD, este panorama cambió drásticamente. Ahora, las personas cuentan con derechos fundamentales sobre sus datos, como:

Acceso a la información: los usuarios pueden conocer qué datos poseen las empresas sobre ellos.
Rectificación de datos: posibilidad de corregir información inexacta.
Derecho al olvido: eliminación de registros personales bajo ciertas condiciones.
Portabilidad de datos: opción de transferir información a otra plataforma.

Unificación de la normativa en la Unión Europea

Antes de 2018, cada país de la Unión Europea tenía su propia legislación en protección de datos, lo que generaba diferencias y obstáculos para las empresas que operaban en múltiples territorios.

El RGPD resolvió este problema al establecer un marco legal único y homogéneo, aplicable en todos los Estados miembros. Esta regulación fortaleció la seguridad jurídica, garantizó mayor protección a los ciudadanos y creó un estándar que otras regiones han tomado como referencia en materia de privacidad digital.

En Forlopd nos dedicamos de forma activa a mantener los procesos de las empresas adecuados al cumplimiento de las normativas del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) así como de la Ley de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales (LOPDGDD)

Puedes solicitarnos más información y nuestros especialistas te asesorarán sobre el mejor modo de empezar a proteger la privacidad y evitar incurrir en posibles sanciones.