Errores comunes cometen las empresas que generan sanciones
La seguridad de la información es un requisito obligatorio, aunque muchas empresas siguen cometiendo errores graves que las dejan expuestas a ciberataques, sanciones legales y pérdida de reputación. A continuación, se presentan los fallos más comunes en la gestión de datos y cómo evitarlos para proteger tu negocio de manera eficaz.
Ignorar las leyes de protección de datos
Algunas Pymes y otras entidades creen que el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) no aplica a su actividad. Esta percepción es un grave error. Las normativas sobre privacidad afectan a cualquier organización que gestione información personal. Ignorarlas puede derivar en sanciones económicas, juicios y pérdida de credibilidad. Adaptarse a la legislación vigente no es solo una obligación, es una medida preventiva imprescindible.
Las consecuencias de este descuido pueden además suponer pérdida de confianza de clientes o involucrarse en litigios con clientes o empleados.
Descuidar la formación del personal
Uno de los errores frecuentes se centra en los empleados, ya que son el primer punto vulnerable. Pensar que todos conocen las normas de seguridad digital y los protocolos acorde a la protección de datos es un riesgo. La mayoría de incidentes se producen por errores humanos, como abrir correos fraudulentos o compartir información confidencial sin querer. Realizar formaciones periódicas mejora la prevención y refuerza una cultura organizacional consciente de los riesgos.
Omitir auditorías de seguridad y análisis de vulnerabilidades
Pasar por alto las auditorías y análisis periódicos es como conducir sin revisar los frenos. Estas evaluaciones detectan fallos y debilidades antes de que sean explotados. Además, ayudan a cumplir con normativas que exigen supervisión continua. Lo recomendable es auditar los sistemas cada trimestre o tras cualquier cambio relevante. Así se mantiene el nivel de protección actualizado.
No establecer controles de acceso adecuados
La información sensible no debe estar al alcance de todos. Permitir el acceso indiscriminado dentro de la empresa aumenta las posibilidades de filtraciones, ya sean accidentales o intencionadas. Implementar controles de acceso por roles, siendo recomendable tener autenticación multifactor y revisiones regulares limita este riesgo y asegura que cada dato solo sea visto por quien realmente lo necesita.
Proteger los datos no termina con bloquear el acceso o usar antivirus. También es vital asegurar cómo y dónde se almacenan los archivos. Sistemas sin cifrado, dispositivos desactualizados o servidores mal configurados pueden dejar puertas abiertas. Establecer políticas de almacenamiento seguras y realizar copias de seguridad cifradas reduce las posibilidades de pérdidas o robos de información.
La seguridad no debe recaer solo en los responsables de informática. Cada persona dentro de la empresa debe entender los riesgos asociados al manejo de datos. Invertir en campañas internas, sesiones de formación y comunicación clara sobre protocolos fortalece la protección desde dentro. Un equipo informado detecta amenazas antes de que causen daño.
Detalles para asegurar el cumplimiento en protección de datos
Para cumplir con la normativa de protección de datos, es clave adoptar un enfoque preventivo y estructurado en toda la organización.
La formación continua del personal es una medida esencial. Un equipo que conoce las leyes y buenas prácticas reduce significativamente los riesgos. Es por ello que las auditorías internas deben realizarse con regularidad ya que ayudan a detectar vulnerabilidades y a mejorar los procedimientos existentes antes de que surjan problemas.
El uso de herramientas tecnológicas adecuadas facilita el control y la gestión segura de los datos personales, cumpliendo con los requisitos legales. Estas soluciones automatizan tareas críticas, garantizan trazabilidad y simplifican la adaptación a cambios normativos. De modo que cumplir con la ley no solo evita sanciones, también fortalece la imagen de la empresa ante clientes y socios.
La protección de datos es una inversión estratégica. Genera confianza, protege la reputación y asegura un crecimiento sostenible en el entorno digital.
Cómo mejorar la seguridad
También es fundamental realizar revisiones periódicas de los permisos. Estas auditorías permiten verificar que solo las personas autorizadas acceden a información sensible. Cuando se detectan accesos innecesarios, deben ser eliminados de inmediato para reducir riesgos.
La formación continua del personal es otro pilar esencial. Los empleados deben comprender la relevancia del control de acceso y estar al tanto de las buenas prácticas en ciberseguridad. Una cultura organizacional enfocada en la protección de datos fortalece significativamente cualquier estrategia de cumplimiento.
En Forlopd ayudamos a empresas y profesionales de diferentes sectores a adaptar sus procesos para cumplir con los requisitos normativos acorde al Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales. Puedes solicitarnos más información a través de info@forlopd.es y nuestros especialistas te ayudarán.