Beneficios de establecer un buen plan formativo en la empresa
Autor del artículo: Gerardo Romero.
Un plan formativo de empresa es una estrategia para mejorar las capacidades de las personas trabajadoras donde se describen las necesidades, objetivos y el plan de estudios que se va a implementar en los próximos meses o en el año en curso.
Los principales beneficios que una organización puede obtener mediante la organización de su plan formativo son:
- Mejorar el talento interno de la empresa. Seguir formando a las personas trabajadoras para que mejoren sus habilidades y capacidades.
- Detectar talento que nos permita crear perfiles interdisciplinares. Encontrar personas que puedan encajar en puestos de nueva creación o en departamentos en crecimiento.
- Aumentar la productividad de los equipos. Detectando tareas obsoletas que nos restan productividad y mejorando las conductas para hacerlas más productivas.
- Conseguir la satisfacción de la plantilla. Las personas que se sienten mejor preparadas para realizar su trabajo están más satisfechas con su desempeño.
- Mejorar la imagen corporativa de la empresa. Al tratarse de un beneficio social para las personas empleadas, se mejora la imagen de marca de la organización.
Principales pasos para desarrollar un plan de formación en la empresa
El objetivo general de implementar un plan formativo en la empresa es potenciar el desarrollo profesional, mejorar la innovación y conseguir la especialización de las personas de la plantilla. Ahora solo nos falta saber cuáles son los pasos principales para desarrollar un buen plan de formación en la empresa.
- Diagnóstico de la situación actual. Definiendo las necesidades formativas de los equipos. Para ello debemos detectar las aptitudes necesarias para mejorar la productividad y ganar competitividad.
- Realizar una evaluación del desempeño de la plantilla para detectar debilidades y fortalezas y así poder establecer los objetivos que queremos conseguir.
- Concretar las personas que deben recibir la formación, en función del equipo o el departamento al que pertenezcan y seleccionando los perfiles profesionales que queremos potenciar.
- Establecer los objetivos de formación. Seleccionando objetivos globales que estén alineados con la estrategia general de la empresa. Para ello tenemos que concretar los conocimientos, habilidades y actitudes que queremos mejorar o cambiar.
- Seleccionar los programas de formación que nos ayuden a conseguir nuestros objetivos o nos posibiliten cumplir con la normativa vigente para tener actualizada la organización. Aquí tendremos que evaluar la oferta formativa de la que disponemos, así como analizar el coste medio persona/hora de formación.
- Concretar el presupuesto que dedicaremos a formación segregado por departamentos o por proyectos en función de las prioridades que marque la estrategia de la empresa. Seleccionando las empresas proveedoras de formación más interesantes.
- Especificar las acciones formativas a implementar detallando objetivos, contenido, metodología, calendario de actuación y sistemas de evaluación.
Desde SERVIFORMA consideramos la importancia de establecer durante los primeros meses del año el plan formativo que ayude a las empresas a conseguir los beneficios que acabas de leer y te ayudamos a organizarlo para que consumas el crédito formativo del que dispones para bonificar la formación programada de tu empresa.