Categorías laborales y clasificación profesional
La clasificación profesional es otro aspecto fundamental. Debe garantizarse que las categorías laborales, funciones y niveles salariales se asignen en base a criterios objetivos y verificables, sin que el género sea un factor determinante. Esto implica realizar auditorías salariales periódicas para detectar posibles brechas retributivas y corregirlas de forma proactiva.
Además, el plan de igualdad debe incorporar medidas para asegurar una proyección profesional equitativa. Esto incluye diseñar procesos de promoción interna transparentes, con requisitos claros y accesibles para todo el personal, así como programas de formación y desarrollo que permitan a todas las personas, sin distinción, alcanzar su máximo potencial.
La sensibilización interna es igualmente esencial. Realizar charlas y campañas de concienciación sobre igualdad de género ayuda a romper prejuicios, promover la empatía y crear un entorno laboral más cohesionado.
¿Por qué es importante implantar un plan de igualdad?
Implantar un plan de igualdad no solo es una obligación legal para muchas empresas en España, sino que también mejora la reputación corporativa, ayuda a retener talento, aumenta la productividad y refuerza la competitividad en el mercado al crear un entorno laboral más justo y equilibrado.
¿Qué empresas están obligadas a tener un plan de igualdad?
Según la normativa vigente, las empresas con 50 o más personas trabajadoras están obligadas a elaborar e implantar un plan de igualdad. No obstante, las organizaciones con menos empleados también pueden desarrollarlo de forma voluntaria para mejorar su cultura corporativa y cumplir con requisitos en licitaciones o convenios.
¿Qué beneficios aporta un plan de igualdad a la empresa?
Entre los principales beneficios destacan:
Cumplimiento legal y prevención de sanciones.
Mejora del clima laboral y de la motivación del personal.
Reducción de la rotación y mayor atracción de talento.
Reputación positiva frente a clientes, proveedores y administraciones.
Acceso a ayudas y licitaciones públicas que exigen planes de igualdad.
En definitiva, el objetivo último de un plan de igualdad es garantizar las mismas oportunidades y posibilidades de evolución profesional para mujeres y hombres, fomentando una cultura corporativa basada en la equidad, el respeto y el talento. Una empresa que apuesta por la igualdad no solo cumple con la normativa, sino que también mejora su reputación, retiene talento y aumenta su competitividad en el mercado.
¿Cómo implantar un plan de igualdad en la empresa?
En Forlopd contamos con una amplía experiencia ayudando a empresas de diferentes sectores de actividad a implantar los procesos que les permitan garantizar una igualdad real dentro del entorno laboral así como protegerse de posibles sanciones administrativas. Puedes solicitarnos un análisis de cumplimiento a través de info@forlopd.es, y nuestros especialistas te guiarán en todo el proceso de adecuación.